Desde el 3 de abril de 2025 están en vigor los aranceles del 25 % impuestos por Estados Unidos a los vehículos importados, una medida que, según Metro Puerto Rico, podría aumentar entre $10,000 y $12,000 el precio de los carros nuevos que llegan a la isla.

El impacto no se limitará a las compras: también encarecerá las reparaciones y los seguros, lo que preocupa a consumidores y concesionarios.

Desde PRADA creemos que, de mantenerse las condiciones actuales, las ventas de carros nuevos podrían caer entre 6 % y 10 % en 2025. La entidad señala que la combinación de aranceles, inflación y endeudamiento creciente de los consumidores está presionando al mercado.

El licenciado Eddie López explicó a NotiCel que el aumento de precios se trasladará también al financiamiento y las pólizas de seguro, encareciendo el costo total de propiedad de un vehículo. “No solo subirá el precio de venta; los consumidores enfrentarán mensualidades más altas y seguros más costosos”, indicó.

En un mercado que ya venía mostrando señales de enfriamiento con caídas interanuales en varios segmentos, este nuevo escenario podría obligar a los concesionarios a revisar su oferta de modelos, reducir inventarios y buscar incentivos para retener a los compradores.

Analistas citados por Metro Puerto Rico coinciden en que el efecto de los aranceles se sentirá también en el mercado de carros usados, ya que el encarecimiento de los nuevos aumentará la demanda y los precios en el segmento de segunda mano.